El portfolio es una colección organizada de trabajos y documentos previamente seleccionados por el estudiante y que reflejan su proceso y su rendimiento en relación con los objetivos de aprendizaje y criterios de evaluación preestablecidos.
El portfolio debe contar con una guía o un índice de contenidos que
determinará el tipo de trabajo y dinámica didáctica que se
llevará a cabo y que puede estar totalmente determinada
por el profesor o puede ser de tipo más abierto con una
mayor participación del alumno.
La introducción identifica y presenta las intenciones u objetivos.
Los temas centrales conforman el cuerpo del portafolio y contienen la documentación seleccionada que muestra la destreza del estudiante. Cada parte contiene una explicación o aspectos relevantes como fechas, pertinencia, razón por el que fuera seleccionado, etc., mostrando su propia reflexión y opinión.
El cierre es una síntesis del aprendizaje efectuado con
relación a los contenidos impartidos.
Una vez organizadas las evidencias, es preciso publicarlas para su conocimiento. No hay dos iguales ya que se caracteriza por incluir procesos de pensamiento creativo y pensamiento divergente, atributos que también lo diferencian de otros instrumentos de
evaluación más homogéneos y convergentes.
La elaboración del mismo no sigue una progresión lineal sino que está sometida a constante evolución.